La bancada suma este mes siete pugnas internas entre la minoría radical y la mayoría moderada, por lo que está entre la ruptura y la inconformidad para analizar la estrategia federal; unos apuestan por mantener la misma, mientras que otros acusan a la Jucopo de carecer de carácter para crear acuerdos
Representativa de la correlación de fuerzas en el interior de Morena, la bancada de ese partido en el Senado ha logrado mantenerse unida, aunque vive constantemente al filo de la ruptura, por la inconformidad frecuente de la minoría radical que arrincona a la mayoría moderada para ceder a sus peticiones, en aras de evitar la fractura.
En este mes se registra la séptima pugna interna entre ambas alas del morenismo, porque nuevamente los radicales pretenden impedir que el Senado analice la estrategia de seguridad del gobierno federal, a pesar que es facultad constitucional de esta Cámara, pero además, está en la antesala de la disputa por la Mesa Directiva del Senado, que desea encabezar José Naro Robles, integrante del ala radical.
Los morenistas radicales en el Senado apuestan a utilizar la misma estrategia que usaron en enero pasado para frenar la comisión de investigación de los excesos del gobierno de Veracruz y ahora impedir que la Junta de Coordinación Política concrete el grupo de trabajo para analizar la estrategia nacional de seguridad pública.
En el ala radical están 20 de los 60 senadores: César Cravioto, Antares Vázquez, José Antonio Álvarez Lima, José Narro Céspedes, Gloria Sánchez, Ernesto Pérez Astorga, Napoleón Gómez Urrutia, Ovidio Peralta, Verónica Camino, Bertha Alicia Caraveo, Mónica Fernández Balboa, Eva Galaz, María Merced González, Martha Guerrero, Citlalli Hernández, Daniel Gutiérrez, Higinio Martínez, Blanca Piña, Ana Lilia Rivera y Héctor Vasconcelos José Narro Robles anunció desde el jueves que un grupo de senadores de Morena se opone a esa comisión, que según él debe ser aprobada sólo por el pleno, porque desde su perspectiva la Junta de Coordinación Política carece de facultades para formar grupos de trabajo, dado que su función es crear acuerdos políticos.
Sin embargo, la integración del grupo de trabajo de la propia Junta no es nuevo y sí forma parte de su dinámica, porque no es una Comisión Especial, ni una Comisión Ordinaria de trabajo, las cuales sí requieren del aval del pleno del Senado. Este grupo de la Junta carece de atribuciones dictaminadoras; es decir, sólo es un grupo de senadores que hará un análisis y entregará su trabajo a la Junta misma.
“El artículo 76 constitucional señala como facultades exclusivas del Senado analizar y aprobar el informe de la Guardia Nacional y la Estrategia Nacional de Seguridad Pública. La unidad es fundamental para frenar la violencia; el diálogo, indispensable. Actuaremos con prudencia”, respondió Monreal Ávila.